Si tienes la intención de adoptar un gato y sientes curiosidad por las razas menos conocidas, en esta lista podrás comprobar cuáles son las 5 razas exóticas de gatos y cuales son algunas de sus diferencias más destacables.
Sphynx o gato esfinge
Es una de las razas de gatos exóticos que más llaman la atención en todo el mundo. Quizá de entre todas, es la más conocida ante la creciente popularidad que ha sufrido en los últimos años. Este tipo de felinos han producido una gran revolución entre las personas amantes de los gatos, pero alérgicas a su pelo.
Al contrario de lo que puede parecer a primera vista debido a su expresión facial y a su aspecto físico, hay que destacar que esta raza es una de las más dócil, sociable y cariñosa. Disfrutan mucho jugando, pegando saltos y subiéndose a sitios altos, pero también son conocidos por su parte tranquila y mimosa.
Mau egipcio

El mau egipcio es una raza de gato doméstico originaria de Egipto. Posee un cuerpo totalmente diferente al Sphynx, más atlético y con mayor cantidad de pelaje.
Le gusta situarse en espacios con altura para sentir mayor control en su campo de visión, aunque es perfectamente adaptable a la vida doméstica y familiar. Su manto es moteado, que contrasta con el color del fondo mientras que las patas y la cola son oscuras. Dispone de hasta cuatro variedades de pelo: plateado, con manchas de color azulado oscuro sobre un fondo plateado claro, bronce con manchas marrones con un tono bronceado en el fondo, color humo moteado con manchas negras en un fondo de color crema y, por último, el peltre.
Es una raza similar al oriental de pelo corto y es muy independiente e inteligente, pero al mismo tiempo afectiva y amistosa. Eso sí, dado que es un gato territorial y celoso no se recomienda dejarle jugar solo con niños.
Thai o siamés moderno
El Siamés moderno es otro de los gatos más particulares y distinguidos que podemos encontrar en todo el mundo. Se trata de una antigua raza que procede del antiguo reino de Siam (Tailandia), que fue trasladada a finales del siglo XIX tanto a Inglaterra como a Estados Unidos.
Siendo un gato de talla mediana, su cuerpo es oriental, tanto elegante como esbelto, flexible y musculoso, con un rostro de forma triangular. La diferencia con el gato siamés tradicional es que este es menos fornido. Además, se caracteriza por tener un manto con un esquema de color más oscura en los puntos donde la temperatura corporal es menor, como las extremidades, la cola, las orejas y la cara, que contrasta con el resto del cuerpo.

Savannah

Esta raza de gato exótica es un híbrido entre un gato doméstico (Felis silvestris catus) y un serval o gato africano salvaje (Leptailurus serval), lo que la convierte en una de las más especiales, raras y complejas de encontrar. Un cruce de finales del siglo XX que dio origen a un gato de constitución alta y delgada, con una apariencia de tamaño mayor que su peso real. Sus colores y manchas son similares al serval.
Tiene la entrada prohibida en determinados países como Australia, ante el riesgo de impacto en la fauna nativa. Pero en lo que respecta a la vida doméstica son animales muy leales, sociables y amigables, aunque esto puede cambiar si son personas extrañas. Cuentan además con una gran habilidad para saltar.
Oriental de pelo corto
La raza de gatos orientales de pelo corto es originaria de Tailandia, donde han sido desde tiempos medievales tomados en alta estima, llegando a ser nombrados gato nacional y gozando de una gran popularidad. Existen diversos documentos que registran la existencia de la raza en la Edad Media.
Comparte parecido con el Siamés o Thai, con un porte elegante, temperamento vivaz y gran inteligencia, siendo de hecho apodado el galgo de los gatos. Es orgulloso, pero extremadamente sensible, reaccionando a cualquier estímulo y rechazando la soledad al ser también muy sociable. Necesita actividad y no soporta el aburrimiento, por lo que suele intentar llamar la atención como sea posible.
