Hay alimentos prohibidos para los perros que jamás debes compartir con tu mascota si no quieres perjudicar su salud. A continuación, detallamos que alimentos debemos evitar en la nutrición de nuestra mascota.
La comida para las personas puede tener efectos negativos en los perros, ya que supone un aporte calórico adicional que puede desequilibrar su alimento e incluso puede ser tóxico o perjudicial. En concreto hay ciertos alimentos que no deberíamos darles. A continuación, te los detallamos:
El chocolate
El chocolate es un alimento muy nocivo para nuestros perros ya que contiene una toxina llamada teobromina. Esta toxina es inocua para los humanos, pero muy nociva para animales, como los perros. Se encuentra presente en la propia semilla de cacao, de donde se obtiene el chocolate, por lo que no existe ningún tipo de chocolate que este exento de esta toxina.
Aunque un consumo ocasional puede que sólo le produzca malestar estomacal con vómitos o diarrea; en mayores cantidades puede provocarle temblores musculares, convulsiones, latidos cardiacos irregulares, hemorragias internas o un ataque al corazón.
La cebolla y el ajo

Tanto la cebolla como el ajo son alimentos muy tóxicos para nuestros perros ya que contienen sulfóxidos. Estos destruyen los glóbulos rojos de la sangre degenerando en una anemia. A su vez, liberan la hemoglobina de estas células, la cual es tóxica para el riñón y causan insuficiencia renal aguda.
Da igual que sean crudos, cocinados o en polvo (condimentos), igualmente son tóxicos para nuestros perros. Cuando un perro come cebolla o ajo, los síntomas no son inmediatos, sino que pasan cuatro o cinco días hasta que muestran los primeros síntomas. Los más típicos son cansancio o intolerancia al ejercicio consecuentes por la anemia.
Los lácteos

Aunque algunos perros consumen leche de vaca sin problemas, a la mayoría no les sienta bien. La leche contiene un azúcar complejo, la lactosa, que necesita una enzima, la lactasa, para ser digerido. Pero los perros, en general, no tienen grandes cantidades de esta enzima en su sistema digestivo ya que dejan de crearla cuando su alimentación con leche materna termina.
No todos los lácteos serán nocivos, ya que el problema no es el lácteo, sino la lactosa. Cuanto más tiempo estén fermentando con las bacterias, menos lactosa tendrá el producto lácteo ya que este es el azúcar que utilizan las bacterias para obtener energía.
Las uvas y pasas

Se desconoce por qué las uvas son tan toxicas para los perros, pero la ingesta de uvas, puede dañarle el riñón y causarle un fallo renal y en pequeñas cantidades provocarles fuertes diarreas, vómitos…
Aunque tu perro haya comido uvas sin padecer ningún problema, no te arriesgues a darle nuevamente ya que ningún perro es inmune a las toxinas de esta fruta.
Tampoco es recomendable darles pasas o derivados de la uva, ya que contienen las mismas toxinas para nuestros perros. Incluso en las pasas están más concentradas, por lo que, a igualdad de dosis, los efectos pueden ser mucho peores.
Las patatas y tomates

Los tomates y patatas pueden ser alimentos tremendamente nutritivos para nuestros perros siempre que se consuman en su estado apropiado de madurez o en el caso de las patatas, de cocción.
Si se consumen antes de tiempo tanto las patatas como los tomates, pueden ser perjudiciales. Las patatas por su contenido en solanina y en el caso del tomate por su contenido en glicoalcaloides.
En el caso de las patatas, es recomendable darlas cocidas o asadas ya que su almidón es indigestible. Una vez cocida resulta totalmente asimilable y una fuente muy interesante de carbohidratos.
Por su parte, el tomate además de en su estado óptimo de madurez, debe ser administrado sin pepitas, ya que pueden originar efectos indeseables en nuestra mascota.