Una de las características más comunes de los felinos es que son animales muy limpios, que se acicalan ellos mismos con frecuencia, por lo que normalmente no hay que bañarlos. Pero, aunque este comportamiento suele ser una ventaja, pues no tenemos que ayudarles en su higiene, esto también puede traer inconvenientes: las famosas y temidas bolas de pelo de los gatos
Estas surgen de que los gatos para limpiarse utilizan su lengua a modo de cepillo, arrastrando así el pelo que se les cae y, al no poder escupirlo, se lo tragan. Normalmente suelen expulsar luego ellos mismos las bolas de pelo que se les forman sin problema. Pero en ocasiones estas bolas de pelo se les atascan, y es ahí cuando surge el problema. Si notas que tu gato está decaído, regurgita y vomita sin expulsar las bolas de pelo con éxito, todo indica a que está teniendo problemas con las bolas de pelo.
Pero, ¿cómo podemos ayudarles nosotros?
En primer lugar, para intentar prevenir esto, deberíamos intentar acostumbrarnos desde el principio a cepillar el pelo de nuestro gato todos los días, con el fin de eliminar los pelos sobrantes. De esta manera él acumulara menos pelos al limpiarse y será más fácil que luego elimine por sí mismo las bolas de pelo. Para esto también viene muy bien contar con la hierba gatera, una planta que además de gustarle mucho a los gatos, los ayudará a purgarse.
Otro remedio casero para ayudar a tu gato si está sufriendo por las bolas de pelo es aplicar un poco de vaselina en su pata, así en el momento en que empiece a limpiarse y se chupe la pata, esta le irá bien para expulsarlas. Si no tienes vaselina a mano prueba con mantequilla, también surgirá efecto. Y si ninguno de estos métodos le alivia, lo mejor será que lo lleves al veterinario.