Cualquier persona que cuente con un gato como mascota tiene presente que una de sus actividades favoritas es dormir. Pero, realmente, ¿cómo duermen los gatos? ¿lo hacen igual que los humanos? ¿o que otros animales? A continuación, os contamos algunas características sobre el curioso descanso de los gatos.
Duermen la mayor parte del día
Y cuando decimos la mayor parte, nos referimos a más de la mitad de las horas que dura un día. Un gato doméstico se pasa una media de 15 horas durmiendo, ya sea en largos periodos continuos o en pequeñas siestas. Este tiempo puede aumentar si se trata de un gatito joven o anciano, que descansan durante todavía más tiempo que los gatos adultos.
Son animales nocturnos
Es decir, la mayor parte de sus horas de sueño se producen durante el día. Este hecho es de especial importancia si quieres que tu gato duerma contigo. Son animales que tienen un horario distinto al nuestro, y cuya mayor actividad se produce al anochecer y al amanecer. Por eso, es posible que tu gato esté despierto cuando tú no, y que esto altere tu descanso.
Casi no duermen profundamente
A pesar de que pasan muchas horas durmiendo, los gatos entran en un sueño profundo sólo una de cada cuatro horas. Durante estos periodos, a pesar de que estén descansando, su cerebro se mantiene tan activo como cuando están despiertos. El resto de su tiempo de descanso lo pasa en un sueño ligero que dura pocos minutos.
Les encanta dormir en sitios calentitos
Debido a que su temperatura corporal desciende cuando duermen, los gatos suelen elegir para su descanso el lugar más cálido que encuentren. Es por eso por lo que a veces recurren a nuestros cuerpos, de los que se desprende calor y en los que pueden encontrar una postura cómoda. Pero, en general, prefieren los sitios resguardados, donde se sienten más seguros.
Algunos gatos roncan
La respuesta es clara, y es que sí. Algunos gatos lo hacen cuando se encuentran en sus fases de sueño profundo. Este hecho se produce especialmente en los gatos con sobrepeso o de determinadas razas con la nariz chata, como los persas.
En conclusión, podemos afirmar que un buen descanso es de vital importancia para los gatos. Por eso, si se produce algún cambio en sus hábitos de sueño, es recomendable hacer una visita al veterinario. Tanto si tu gato duerme más de lo normal, como si lo hace cada vez durante menos tiempo, ambas cosas pueden significar problemas.